TODAS LAS FISTULAS REQUIEREN CIRUGIA.
¿Qué es un absceso anal?
Un absceso anal es una cavidad infectada llena de pus que se encuentra cerca del ano o el recto. El 90% de los abscesos son el resultado de una infección aguda en las glándulas internas del ano. En ocasiones, las bacterias, materia fecal o cuerpos extraños pueden obstruir una glándula anal.
¿Qué es una fístula anal?
Una fístula anal (también comúnmente llamada fístula en el ano) es con frecuencia el resultado de un absceso anal anterior o actual. Esto ocurre hasta en el 50% de los pacientes con abscesos. La anatomía normal incluye pequeñas glándulas justo dentro del ano. La fístula es el túnel que se forma debajo de la piel y se conecta las glándulas infectadas obstruidas a un absceso. Una fístula puede estar presente con o sin un absceso y puede conectarse simplemente a la piel de las nalgas cerca de la abertura anal.
¿Cuál es su tratamiento?
La sola presencia de una fistula anal sintomática, es la indicación para la operación. La curación espontanea de una fístula anal es muy rara. Una fístula no atendida puede ocasionar abscesos repetidos, presencia persistente de drenaje muco-purulento, humedad y producir un proceso inflamatorio crónico que llegue a producir un cáncer anal.
¿Entonces todos los granos que llegan a salir en la región ano perineal son abscesos y fístulas?
NO! Es muy importante hacer el diagnóstico diferencia de otras enfermedades que pueden provocar abscesos y fístulas: puede haber enfermedades de la piel como los quistes epidérmicos, la forunculosis, hidradenitis supurativa, enfermedad de Crohn, neoplasia anal y en pacientes con VIH pueden existir otras enfermedades que provoquen datos similares.
Es por eso muy importante que te valore el especialista en la región para establecer el diagnóstico diferencial.
Por eso algunas fístulas en la región ano perineal que no tienen un origen ano rectal llegan a curar con algunos remedios, pero no te dejes engañar, a veces gastas muchísimo más y sufres hasta llegar a lo inevitable. Varios pacientes refieren después de la cirugía que de saber el resultado final (positivo y con molestias menores) nunca habrían dejado pasar tanto tiempo. NO LO PIENSES MUCHO NO VALE LA PENA TANTO DOLOR Y SUFRIMIENTO SI AL FINAL EL REMEDIO ES LA CIRUGIA.
¿Qué es un absceso anal?
Un absceso anal es una cavidad infectada llena de pus que se encuentra cerca del ano o el recto. El 90% de los abscesos son el resultado de una infección aguda en las glándulas internas del ano. En ocasiones, las bacterias, materia fecal o cuerpos extraños pueden obstruir una glándula anal.
¿Qué es una fístula anal?
Una fístula anal (también comúnmente llamada fístula en el ano) es con frecuencia el resultado de un absceso anal anterior o actual. Esto ocurre hasta en el 50% de los pacientes con abscesos. La anatomía normal incluye pequeñas glándulas justo dentro del ano. La fístula es el túnel que se forma debajo de la piel y se conecta las glándulas infectadas obstruidas a un absceso. Una fístula puede estar presente con o sin un absceso y puede conectarse simplemente a la piel de las nalgas cerca de la abertura anal.
¿Cuál es su tratamiento?
La sola presencia de una fistula anal sintomática, es la indicación para la operación. La curación espontanea de una fístula anal es muy rara. Una fístula no atendida puede ocasionar abscesos repetidos, presencia persistente de drenaje muco-purulento, humedad y producir un proceso inflamatorio crónico que llegue a producir un cáncer anal.
¿Entonces todos los granos que llegan a salir en la región ano perineal son abscesos y fístulas?
NO! Es muy importante hacer el diagnóstico diferencia de otras enfermedades que pueden provocar abscesos y fístulas: puede haber enfermedades de la piel como los quistes epidérmicos, la forunculosis, hidradenitis supurativa, enfermedad de Crohn, neoplasia anal y en pacientes con VIH pueden existir otras enfermedades que provoquen datos similares.
Es por eso muy importante que te valore el especialista en la región para establecer el diagnóstico diferencial.
Por eso algunas fístulas en la región ano perineal que no tienen un origen ano rectal llegan a curar con algunos remedios, pero no te dejes engañar, a veces gastas muchísimo más y sufres hasta llegar a lo inevitable. Varios pacientes refieren después de la cirugía que de saber el resultado final (positivo y con molestias menores) nunca habrían dejado pasar tanto tiempo. NO LO PIENSES MUCHO NO VALE LA PENA TANTO DOLOR Y SUFRIMIENTO SI AL FINAL EL REMEDIO ES LA CIRUGIA.
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